¿Quién no ha hecho ese mítico sonido en la piscina o en la playa?

Este verano se cumplen 50 años del estreno de Jaws (Tiburón), la película que nos enseñó que lo más aterrador no es lo que se ve… sino lo que se intuye.

Un tiburón mecánico que apenas funcionaba y un director joven con más ingenio que medios.

Y aun así, Spielberg reventó la taquilla.

¿Sabes qué lo cambió todo?

Que no mostraron el tiburón durante la primera hora.

Solo la música. La tensión. El suspense.


La gente se imaginaba lo peor… y eso vendía más que cualquier bicho de plástico.

¿Y qué tiene que ver esto con tu negocio?

Mucho.

Porque si tú estás mostrando todo, contando todo, enseñando hasta la cocina… sin enganchar al cliente…

No hay compra.

No hay VENTAS

Y si no estás contando nada porque no sabes cómo explicarlo para emocionar…

Tampoco compra.

El suspense vende.

La claridad también.

Y el equilibrio entre ambos, más aún.

¿Tú estás vendiendo como Spielberg…

o estás enseñando el tiburón antes de tiempo y espantando a tus clientes?

Todo esto (y mucho más) lo revisamos en la consultoría de tu negocio.

Soy José Levy. Desde 1992 en Turismo. Desde 2003 ayudando a negocios de bodas y eventos a contar su historia sin asustar a nadie… salvo a la competencia.

Japi dei.

Por cierto, ya tienes mi libro ¿Te Casas? Que no se lo coma el tiburón.

Haz clic aquí