Hoy hacemos lo que ellos no harán (y nos lo pasamos mucho mejor)
Si lo piensas un segundo…
«Hoy hacemos lo que ellos no harán
para que mañana podamos lograr lo que ellos no pueden.»
— Dwayne Johnson
alias “La Roca”
alias el tipo que no pide hielo en el whisky.
¿Y sabes qué? Tiene más razón que un Excel.
Porque mientras algunos equipos de empresa están en oficinas tan grises como sus ideas, tú puedes estar corriendo por la arena, comiéndote una paella en una masía privada, o gritando como un loco mientras haces una competición de paddle surf con tu jefe (al que por fin podrás mojar legalmente).
Sí, mientras ellos están rellenando documentos varios…
Tú puedes estar haciendo una cata de cervezas artesanas.
Mientras ellos discuten en reuniones eternas sobre “alinear sinergias”…
Tú puedes estar metido en una gincana gamberra con risas garantizadas y fotos increíbles de recuerdo.
Y mientras ellos se preguntan por qué sus empleados no se implican…
Tú tendrás un equipo que no solo se implica, ¡se lanza de cabeza!
Porque hay una verdad incómoda que muchas empresas todavía no han entendido:
El verdadero rendimiento no nace en una reunión.
Nace en una barbacoa después de una carrera de sacos.
Y por eso, organizamos eventos de teambuilding para empresas con sangre en las venas.
Nada de salas con powerpoint y cafés de máquina.
Aquí hablamos de experiencias de verdad, en masías privadas o a pie de playa, con todo lo necesario:
buena comida, bebida, juegos retorcidos (pero legales) y sobre todo, un plan para que vuestro equipo no se olvide jamás de este día.
Esto no es una charla motivacional.
Esto es que el lunes siguiente tus empleados digan:
“¿Cuándo repetimos?”
¿Quieres un equipo más unido, más alegre y que no sea aburrido?
Entonces lo tienes claro:
Hoy hacemos lo que ellos no harán…
para que mañana tú y tu equipo logréis lo que ellos no pueden ni imaginar.
Y si quieres reservar uno de nuestros espacios (o simplemente saber si te va a tocar correr por la arena o bailar encima de una mesa), escríbenos ahora.
Tenemos el plan.
Tú solo trae las ganas.
Japi dei.
José E. Levy
