¿En qué punto estás?
¿En qué punto estás?
Si sigues así, no vas a despegar
Vamos a hablar sin rodeos/ no jorses in the rodeo.
Sólo hay tres frases que escucho ALL THE TIME cuando hablo con profesionales del mundo de las bodas y eventos.
Tres frases que dicen mucho más de lo que parece.
A ver cuál es la tuya.
- “Lo hago como extra… cuando me vaya bien, dejaré mi trabajo”
Vamos a ver.
Estás en modo esperanza ON.
Como quien compra un décimo de lotería y ya está mirando deportivos.
Si estás esperando a que tu negocio de bodas despegue mientras lo tratas como un hobby de domingo por la tarde, no va a pasar/ never in de laif
¿Quieres vivir de esto?
Pues tendrás que tratarlo como lo que es: un negocio.
Eso requiere horas, pasta, foco y decisiones.
Si estás empezando o sigues con el piloto automático, lo que necesitas no es más tiempo.
Necesitas claridad.
Y ayuda.
Deja de jugar a las bodas y empieza a facturar de verdad.
Nadie construye un negocio sólido “a ratos”.
- “Me va genial, me baño en billetes como el Tío Gilito”
Si estás aquí, bravo.
De verdad.
Te aplaudo fuerte.
Llegar hasta ahí no es fácil.
Pero…sí, hay un “pero”…
Cuando estás arriba del todo, es el mejor momento para preparar el paracaídas/ going daun
La economía cambia, la competencia aprieta, las campañas flojean, tú te agotas.
Si no tienes un plan cuando todo va bien, cuando lleguen las vacas flacas/ de skinny cows, no te queda margen de reacción.
¿Te va bien?
Perfecto.
Invirtamos ahora en que te siga yendo bien dentro de un año, de 2, de 3…
En diversificar, en reforzar procesos, en abrir nuevas líneas de negocio, en no depender de un único canal.
El momento de invertir en estrategia es ahora.
No cuando ya estés pasándolo mal.
- “Me va, me va, me va… bueno/ regular/ voy tirando/ aquí estamos.”
Me va la vida, me va la gente de aquí y de allá.
Me va la fiesta, la madrugada, me va el cantar…
Este es el estadio favorito del autoengaño profesional.
Y lo sabes.
No estás mal, pero tampoco bien.
Pagas las deudas.
Te entran algunas bodas.
Tienes trabajo sin estar a tope.
Este estado es el más peligroso.
Porque da la falsa sensación de estabilidad.
Lo que realmente es… es una caída lenta.
Si no te planteas crecer, si no haces ajustes, si no te atreves a mirar el negocio desde fuera con claridad… vas para abajo.
La única forma de evitarlo es cambiar el chip, auditar lo que haces, detectar los bloqueos y empezar a implementar estrategias reales que te empujen hacia arriba.
O te mueves tú… o te mueve el mercado.
Ya sabemos cómo es el mercado cuando te mueve sin avisar.
Así que…
Tanto si estás arrancando, como si ya eres top o si estás en esa fase de “ni fu ni fa”, lo que toca es mirarte al espejo y decidir:
¿Quiero que esto desaparezca?
¿Estoy dispuesto a perderlo todo por no moverme?
¿Lamentaré no haber tomado decisiones para reaccionar a tiempo?
El viento no cambia solo.
Se sopla con acciones.
«Cada día nos trae nuevas opciones»
Martha Beck.
Japi dei, my friend.
José Levy
Ayudo a profesionales del sector bodas
a ganar más y trabajar menos,
con una estrategia de negocio clara y realista.
Si aún no tienes mi primer libro, Haz clic aquí
Si no te arranco una sonrisa te dedico un post.
https://www.celebrationartsgroup.com/blog/