Michael J. Fox lo dijo bien dicho, well said:
«La dignidad de uno puede verse asaltada, vandalizada o cruelmente criticada, pero nadie te la puede arrebatar mientras no te rindas.»
Y te lo decimos nosotros, que hemos visto a ejecutivos encorbatados lanzarse a una piscina con flotador de flamenco rosa sin perder ni un ápice de autoridad.
Bueno, un poquito sí.
La dignidad, amigos, no se pierde por mojarte los pantalones.
Se pierde cuando finges disfrutar de un coffee break con galletas y sandwiches de jamón como si fuera algo único.
Por eso te proponemos algo distinto. Algo gamberro, divertido, sin corbatas ni filtros.
No filters.
Teambuildings de verdad. Divertidos.
De los que generan multitud de anécdotas que no caben en un informe.
¿Dónde?
– En la playa de Castelldefels, con sol, agua y actividades que despiertan hasta al de IT.
– En masías cerca de Barcelona, con césped, piscina, espacio para correr, jugar o simplemente no hablar de KPIs.
¿Qué hacemos?
– Gymkanas que mezclan el trabajo en equipo con el humor
– Retos absurdos y desafíos colaborativos
– Opciones con DJ, bebidas, catering, vestuarios, duchas y hasta rincón de siesta si alguien se nos viene abajo
¿Para quién?
Para empresas que entienden que un equipo unido no se construye solo con “slides de motivación”.
Para agencias que quieren ofrecer algo diferente de verdad.
Y para todos aquellos que ya han hecho lo típico y ahora quieren pasárselo como críos con tarjeta de empresa.
Porque sí: puede que te critiquen al principio por organizar algo poco “convencional”.
Puede que haya un par de cejas levantadas en la junta para tomar la decisión.
Pero mientras tu equipo lo recuerde con una sonrisa y sin haberse rendido… tu dignidad sigue intacta.
Y te felicitarán.
Como dijo el gran Michael J. Fox:
«La dignidad de uno puede verse asaltada, vandalizada o cruelmente criticada, pero nadie te la puede arrebatar mientras no te rindas.»
Así que ponte el equipo y lidera como se debe:
con los pies en el césped y la cabeza en lo importante.
¿Te vienes?
Japi dei.
