LinkedIn

 

 

 

Yo en LinkedIn no vendo un carajo.

 

Y está bien que alguien lo diga.

Antes de nada: enhorabuena a todos los que estáis sacándole partido a LinkedIn.

De verdad.

Tiene mérito.

Pero yo hoy vengo a contar otra historia. La mía.

La del tipo que ha enviado decenas, cientos de mensajes por LinkedIn.

Mensajes con copy. Sin copy. Hechos con IA, sin IA, con cariño, con desgana, en B/N, en color… Lo he probado todo, creo.

¿Sabes qué?

Que no me ha funcionado.

He conectado con gente. Sí.

He tenido conversaciones interesantes. También.

¿Me han contratado gracias a LinkedIn?

No.

Ni una vez.

Res de res. (no hablo de vacas)

Puede que alguien haya entrado a curiosear mi perfil tras un email o una propuesta, vale.

Pero si me preguntas si LinkedIn ha sido una fuente directa y real de clientes…

La respuesta es no.

Y no lo digo con rencor.

Un poquito sí.

A little bit

Yo también caí en el rollo de “LinkedIn es una red profesional”.

Que si es el sitio donde están los que deciden.

Que si la clave está en crear relaciones, publicar valor, bla bla bla…

Vale.

Pues yo lo he intentado. He publicado contenido. He respondido. He programado posts. He hecho todo lo que se supone que hay que hacer.

Y nada.

Ni una mísera contratación directa.

Seguramente lo he hecho mal.

¿Todo?

Puede ser.

¿Será que no he sabido conectar con mi público ideal?

Probable.

¿Será que LinkedIn no es para mí?

También puede ser.

Pero ¿sabes qué?

No pasa nada.

No passa res. (sigo sin hablar de vacas, ni de bueyes)

Está bien que no todo funcione para todos.

A mí me ha funcionado el email. He cerrado presupuestos por otras vías.

Pero por LinkedIn, no.

Y eso no me hace peor profesional.

Ni a ti mejor, si a ti sí te funciona.

Simplemente no es mi canal.

¿Lo voy a seguir intentando?

Puede.

Le estoy dando otra oportunidad.

Mi mujer dice que es una red útil y “profesionás”.

A mailoveliwai le hago caso.

Posiblemente leerá esto en algún momento.

Invierto en no hacerme daño.

Al final, cada uno tiene que encontrar el canal que le encaje.

Y si no lo encuentra, crearlo.

 

Solo quería dejar aquí mi testimonio, por si tú también estás hasta el gorro de subir posts sin repercusión.

Por si te preguntas si eres el único al que no le funciona.

No lo eres.

No estás solo, brother.

No pasa nada si no vendes por LinkedIn.

Lo importante es que no te vendas tú por un like.

Lo hablamos en la consultoría.

 

Japi dei, my friend.

 

 

 

José Levy

 

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